El estreno de la película de Baz Luhrmann ha reavivado el interés por el modo de vida y la estética de los años 20 estadounidenses. El Art Decó se apodera de la arquitectura, la joyería, la vestimenta, los muebles y los diversos elementos de la vida diaria.
Exquisitos candelabros, copas, vasos y licoreras de fino cristal tallado, frascos para perfume, suaves y sofisticados cojines, preciosos jarrones, glamour, alcohol …El estreno de la película “El Gran Gatsby” nos devuelve a los felices años veinte en Nueva York, tiempo de diversión, emoción, fiestas multitudinarias y opulencia. Cuando el millonario Jay Gatsby montaba una de sus extravagantes juergas, ¡la ostentación era el invitado de excepción!
El estreno de la última versión cinematográfica de la novela de J. Scott Fitzgerald nos traslada a aquella época, a la elegancia, a la combinación de colores y estampados, al vintage y al art decó. El recuerdo nos devuelve a una época en la que el mundo avanzaba hacia algo completamente diferente de lo que había visto hasta ese momento. Las mujeres se liberan de sus ataduras, EEUU consolida su posición como nación dominante y la moda y la estética dan un vuelco haciendo que avancen hacia un lugar del que ya nunca volverán. Vestidos cortos e insinuantes, accesorios recargados, plumas y flecos, jazz, charlestón…
Nueva vida, nueva estética
Tras la Primera Guerra, el mundo cambia y quiere olvidarse de la miseria vivida. La estética y la decoración, al igual que la sociedad y la moda, inauguran una nueva era en la que el Art Decó se apodera de la arquitectura, la joyería, la vestimenta, los muebles y los diversos elementos de la vida diaria. No es fácil definir las características de este estilo, ya que combina multitud de diversas y, en muchas ocasiones, contradictorias influencias. La decoración es eclética pero con estilo, suele mezclar materiales que dan un toque vintage a la vez que moderno a las estancias y apuesta por lo barroco.
Todas las tendencias vuelven, y la moda ahora es recrear esta época en nuestra casa. Entre los elementos decorativos que no pueden faltar está la joyería, las superficies metálicas de brillo sutil y los materiales industriales. La abundancia y el recargamiento es la clave, lo austero queda atrás y el lujo es el leitmotiv de este estilo.
Luxmader ha querido evocar también esta alocada época con diferentes colecciones que encajan, a la perfección, en estancias vintage que recuerdan a los años 20. ¿Qué mejor que decorar una estancia art decó con venecianas de piel de anaconda, o con la serie Luis XVI, de pan de oro y plata. O decantarse por la serie para paneles Abstract (última imagen), realizada con films decorativos con diversas propiedades técnicas.
Consejos trendy
En la paleta de colores del Art Decó, son indispensables los tonos dorados, pinceladas nacaradas y acentos en magentas y ópalo. Además, hay una serie de básicos que no deben faltar como el negro y el plata, que hay que combinar con rojos, verdes, blanco, grises o azules. ¡Casi cualquier mezcla sirve para dar vida a las estancias! El truco, no utilizar más de tres colores para evitar la sobrecarga.
Para el suelo, lo ideal es emplear baldosas de colores, aunque también es común el uso del blanco y negro. Si queremos poner alfombras, deben tener diseños de flores o remolinos en marrón, gris o negro.
Las lámparas son las protagonistas de las estancias vintage. Podremos poner tantas cuantas queramos de techo, de mesa e incluso de piso. Lo ideal es que tengan diseños y formas originales y que estén construidas en materiales como el acero. Si conseguimos lámparas con pantallas de vidrio soplado, en dorado y plateado, conseguiremos recrear casi a la perfección aquellos locos años veinte.
Los muebles deben tener un diseño elegante, nada minimalista, que combinen la madera noble con la tapicería en cuero o en telas como el terciopelo. No pueden faltar, como accesorios y adornos; espejos, esculturas y vasos decorativos.
